Una anulación es una declaración de un tribunal, el tribunal de la Iglesia Católica, de que un matrimonio que se consideraba válido según la ley de la Iglesia en realidad no cumplía con al menos uno de los elementos esenciales requeridos para una unión vinculante. A diferencia del divorcio civil, una anulación no borra algo que ya estaba allí, sino que es una declaración de que en realidad nunca se celebró un matrimonio válido el día de la boda. Una declaración de nulidad no niega que alguna vez existió una relación entre la pareja, o que los cónyuges se amaban verdaderamente.



El proceso de anulación no debe completarse solo. Si necesita una anulación o tiene preguntas sobre una anulación, llame a la oficina parroquial (419-422-2646) y alguien capacitado en el proceso de anulación de la Iglesia Católica será su guía y apoyo.